* Sin vergüenza *
Cristóbal: Voy, momento.
[Pitido]
Fernanda.
- Cristóbal.
Hola.
Yo... mira...
¿Cómo te digo? Yo...
- Pero... ¿qué tienes?
- Es que estoy un poquito
agitada porque venía corriendo.
- ¿Pero por qué?
¿Te pasa algo?
[Toma aire]
- Hoy vi mi futuro
y no me gustó.
Y ya no me voy a arrepentir.
- ¿Arrepentirte de qué?
[Respiración agitada]
- De estar contigo.
Yo quiero estar contigo.
* Como viento fresco
Te veo pasar *
[* * * ]
- Pero... ¿tú estás segura
de lo que estás diciendo?
- Sí, yo estoy segura.
Yo quiero estar contigo, yo...
quiero intentar
ser feliz contigo.
- Es que yo no quiero que
te sientas presionada por mí.
Si quieres yo espero que
tú soluciones
tus cosas con Esteban.
- No, yo no quiero esperar más.
A no ser que tú ya no quieras
nada conmigo.
-No, mi vida,
es que no quiero que nos vayamos
a arrepentir de todo esto.
- No nos vamos a arrepentir.
- Yo no me voy a arrepentir.
- ¡Papi!
- Apenas sintió la voz,
ya no quiso quedarse acostada.
- ¿Cómo está mi piojo?
¿Qué haces despierta
a esta hora?
- Papi, no quiero dormir.
- Yo... regreso luego
o hablamos después.
Es que yo también soy mamá
y yo entiendo que Manuela
quiera estar contigo ahora.
- Si quieres conversamos
esto en otro lado.
- ¿Y la niña?
- Yo se la dejo a su nana
que le va a contar un cuento
que yo mismo le enseñé.
[* * * ]
- ¿Eh?
- Sí.
- Sí.
[* * *]
Y tú no te muevas de acá,
¿okay?
[* * * ]
* Déjame tenerte
Y cubrirte de besos *
* Como sol ardiente
Fundirte de amor *
[Música de videojuego]
[Risa]
Kike: Imbécil tú no sabes,
quién es Kike...
Toma chango tu banana.
¡Eh! Me está llegando por atrás,
me va a matar así.
No, no, no. Síguele.
¡Dale, síguele!
Te voy a tirar otra bazuca.
- ¡Que no!
- ¿Cómo no?
- ¡No!
- ¡Una, dos!
[Sonido videojuego]
- ¿Por qué no están estudiando,
si se puede saber?
- Ah, porque...
Porque yo te voy
a explicar ahorita lo que...
Lo que estábamos haciendo.
- ¿Qué me vas a explicar, Kike?
No te puedes poner
a la altura de Vicente.
- No...
No, es que esto es una técnica
que yo tengo.
Entonces, le dije Vicente, "mira
vamos a relajar la mente un rato
y después las matemáticas
fácil que te van a entrar."
- ¡Kike, por favor!
Te pedí que
te pusieras a estudiar
porque está a punto
de tronar el año.
- Pues sí...
pero era una técnica,
ya te dije,
para que aprenda mejor.
Aparte, las fracciones
ya se las sabe, ¿verdad?
- Sí, sí, yo las fracciones
me las sé.
- ¿Ya ves?
- Son muy fáciles.
- Apagan este juego
inmediatamente
o te juro, Vicente, que este
sí lo regalo al malabarista.
- ¡No!
Maite: ¡Pero ya!
- Cinco minutos. ¡No, ya voy
a pasar al segundo nivel!
[* * * ]
- Ay, mi amor.
- Adiós, Kike.
- Mi amor, si solo...
- Adiós.
- Agarra tu cuaderno y te espero
allá afuera en la sala.
¡Pero ya, Vicente, ya!
- ¿Ya ves?
[* * * ]
[Azota puerta]
- ¿Mañana le seguimos?
[* * * ]
[Ambiente calle]
- Tu propina y un regalito.
- ¿Toallas higiénicas?
- Sí, bueno para tu hermana
o tu novia, o qué sé yo.
Es un regalo que dan en
el laboratorio donde yo trabajo.
- Bueno. Gracias.
- De nada. Chao.
- Ay ¿quién me habrá mandado
estos regalos?
A ver...
"Espero que te guste.
Al menos, los tacones
son firmes. Yo mismo los probé".
A ver...
[* * *]
[Asombro]
[Risa]
[* * *]
"¿De que te sirve
un par de zapatos
si no tienes con que lucirlos?"
"Eso sí, reconozco que
esto no me lo probé".
[* * * ]
[Asombro]
[* * * ]
[Asombro]
[Asombro]
[Risa]
¡Ay, Raimundo Montes!
Estás haciendo méritos.
Cómo se nota que
me conoces muy bien
y que quieres complacerme.
¡Ay, está precioso!
* Sin vergüenza **
* Sin vergüenza *
[Ambiente calle]
- Hola.
¡Ya llegué!
[Asombro]
¿Y ese desastre?
[* * * ]
- Ay, mi amor.
Qué bueno que llegaste.
- ¿Pero por qué, Rafa?
¿Qué pasó?
- No, no pasó nada.
- Ay, no, le diste pizza
a los niños.
- Mi amor,
¿qué querías que hiciera?
No querían comer nada
más que eso.
- ¿Y dónde están?
- Están jugando en el patio.
- ¿A esta hora?
¡Roque, Candelaria!
Ay, Dios mío.
Ve cómo están, Rafael.
Están sucios y mojados.
- ¿Qué estaban haciendo?
- Jugando en el patio.
[* * * ]
- Si quieres
nos vamos a otro lado.
Aquí parecemos dos adolescentes
metidos en un carro.
[* * *]
- Ojalá lo fuéramos y todo sería
más simple, más fácil.
No le haríamos daño a nadie.
[* * * ]
Yo no me he arrepentido de nada.
[** * ]
- ¿Estás segura?
- Estoy segura.
[* * * ]
[Tocan ventanilla]
- Buenas noches.
[* * * ]
- Les informo que esta zona es
muy peligrosa para estacionar.
Les recomiendo, por favor,
que se retiren.
- Sí.
- Gracias.
[* * * ]
* Sin vergüenza *
[* * * ]
* Sin vergüenza *
[* * * ]
* Sin vergüenza *
[Narrador]
Telemundo presenta
.
[* * * ]
[Ríen]
* Sin vergüenza, *
* Me conquistaste a mí *
* Sin vergüenza, *
* Nunca amaré así **
* Eres la única estación *
* En mi corazón *
* Has pintado el verdadero *
* Color del amor *
* Sin vergüenza sentiste *
* La pasión *
* Sin vergüenza robaste *
* Mi corazón *
* Inseparables así *
* Sin vergüenza *
* Nadie amará así *
* Unidas siempre *
* Por la vida, vida *
* Sin ningún temor, *
* Directo al amor *
* Sin vergüenza encendiste **
* La pasión *
* Sin vergüenza robaste *
- Hola.
* Mi corazón *
- Buenos días.
- Adiós.
- Prensa de hoy.
- Véndame uno.
- Linda.
- Toma.
- Gracias, amor.
[* * * ]
* Sin vergüenza, *
* Enloqueciste así **
* Sin vergüenza, *
* Me agarraste a mí *
* Eres la única estación *
* En mi corazón *
* Has pintado el verdadero *
* Color del amor *
* Sin vergüenza **
[Todas] ¡Sin vergüenza!
[Ráfaga]
* Sin vergüenza *
- Está ardiendo en fiebre.
- Mi amor, ¿está muy alta?
- Sí, sí está muy alta.
Rafael, ¿por qué los dejaste
jugar afuera?
Hace frío y es de noche.
- No sé, perdón no me di cuenta,
estaba trabajando.
[* * * ]
[Ambiente calle]
[Suspiro]
[* * * ]
- Raimundo,
yo no soy una niña ya.
Además tú sabes que yo jamás
he necesitado que tú me digas
que me quieres
para acostarme contigo.
¿Mmm?
Estamos claros, verdad?
Bueno, gracias por tu café.
Está muy rico, pero ahora tengo
que regresar a trabajar
en mi súper
escritorio funcional.
[Raimundo ríe]
Bueno...
[Raimundo ríe]
[Tocan puerta]
- Señor, su pedido.
- ¿Mi pedido?
No, no, se confundieron,
yo no pedí nada.
Mire, yo no...
[* * * ]
- ¿Qué tal?
[Renata ríe]
[* * * ]
- Guau, guau, Renata, qué...
Qué sorpresa tan agradable.
- A ver...
[* * *]
- Tengo dos entradas
para el teatro.
Y bueno, quiero saber si...
Si quieres acompañarme.
* Veo pasar *
- El teatro.
Dos entradas.
* Ay, mira cómo
La ciudad te castiga *
* Te castiga, mi vida *
* Y mira cómo se parece
Mi vida a la tuya *
* Cuando te veo pasar *
[* * * ]
[Rechina]
[Puerta]
- Fernanda, yo no quiero
que te sientas obligada.
- Yo lo sé.
[* * * ]
- Si quieres... nos podemos ir.
[* * * ]
Sí, mejor vámonos.
- No.
Me quedo.
[* * * ]
Me quedo.
[* * * ]
* Dame tu mirada *
* No me digas nada *
* Que mi alma
Hoy no puede volar *
* Déjame tenerte
Y cubrirte de besos *
* Como sol ardiente
Fundirte de amor *
[* * * ]
[* * * ]
[Suspiro]
- ¿Cómo sigue?
- Tiene 39 y medio.
- Mi amor, ¿no quieres que
lo llevamos a la clínica?
- No, mejor vamos a esperar
a ver si le hace efecto
la medicina que le di, ¿sí?
- Bueno.
Paloma, perdón.
Perdón, de verdad
me siento muy culpable.
No fue mi intención.
- No, Rafa, no, no hay que
buscar culpables porque
sino yo también lo sería,
te los dejé mucho tiempo.
- Mami, me siento mal.
Estoy enferma...
- Ay, mi amor.
- Tiene fiebre.
No mucha, pero sí. Ven.
- Le voy a dar su medicina.
Rafa, ¿llamaste a la farmacia?
- Sí, sí, sí.
Pedí el irubu...
- Ibuprofeno infantil.
- ¿Y el jarabe para la tos?
- Sí.
- ¿Y vitamina C?
- También.
- Todo lo que te anoté.
- Sí, sí, doctora.
- No, Rafa, no te rías.
Esto es una emergencia.
Tú no sabes lo que
es tener niños enfermos.
Cuando cae uno, caen todos.
[Timbre]
Ya llegaron las medicinas,
voy por ellas.
Solamente espero que
no nos contagiemos tú y yo Rafa.
[Estornudo]
Ay, Rafa, ¿ves?
Te lo dije.
[Estornudo]
[* * *]
- Kike, vete.
No me pongas esa cara
porque metiste la pata,
así que no te voy a perdonar.
- Gitana, pero tampoco...
- ¿Gitana qué?
Te pedí el favor de que te
pusieras a estudiar con Vicente,
no que te pusieras a jugar
toda la tarde con él.
Deja de estar haciendo...
[Maite suspira]
Resuelve ese problema
para que te vayas a acostar ya.
- Amor, es que el tiempo
pasó muy rápido.
Pero ya estábamos
a punto de estudiar.
Dos minutitos más y ya íbamos
a empezar a estudiar.
Y ya con la mente relajada
y todo, ¿verdad, Vicente?
- Dile.
- Yo no sé.
Yo te dije que era mejor
que estudiáramos
y tú me dijiste que no.
- ¡No es cierto,
no seas mentiroso!
Yo te dije que teníamos
que estudiar en ese momento...
- Ey, ¿se callan?
¡Se callan! ¡Se callan!
¡Dije que se callan los dos!
- ¡Los mataste con la bazuca!
- Otro día siguen con sus
discusiones de alto nivel.
- Mi amor...
- ¡Vete!
Y tú concéntrate en lo tuyo,
Vicente, por favor.
Vete.
[* * * ]
- ¡Por tu culpa nos mataron!
[* * * ]
[Portazo]
- ¡Me parece insólito
que no tengas el más mínimo
grado de preocupación, Vicente!
Cuando sabes que
de esta prueba depende
que subas el promedio de
matemáticas. ¿Qué te pasa?
¿Tienes alguna explicación?
- Maite...
Tengo todo bajo control.
Por favor...
Mira, tú me enseñaste muy bien
todos los resultados buenos.
[* * *]
- Vas a repetir todo esto
para ejercitar
y no te vas a parar de aquí
hasta que no termines.
Y te estoy viendo.
[* * *]
[* * * ]
- ¿Qué te pasa, mi vida?
- Nada.
- No seas mentirosa.
[* * * ]
- Es que yo...
Yo...
- Fernanda, no quiero que esto
se vuelva una tortura para ti.
Sino es mejor que...
- No, no se trata de eso.
- Mi vida, yo no quiero
que te sientas mal
por todo lo que ha pasado.
Si es así, dímelo.
Estoy aquí contigo.
[Risa con llanto]
- Es que...
Llevo mucho tiempo
guardando todo lo que siento.
[Llanto]
Sin decírselo a nadie
para no molestar o...
tal vez...
para no sufrir y...
Y no sé...
Ya no aguanto.
[* * * ]
- ¿Estás arrepentida?
[* * * ]
- No.
Estoy abrumada, estoy...
Estoy frustrada.
Estoy emocionada, estoy feliz.
Pero arrepentida no.
- Parece que no te acuerdas que
en el colegio decías lo mismo.
¿Quién estaba ahí
como tu paño de lágrimas
para consolarte, para apoyarte?
- Tú.
Mi mejor amigo.
- Solo espero que
ya hayas superado ese
sta tus, ¿no?
- Sí.
[Risa]
Claro que sí.
- ¿Ves, mi vida? Que por
lo menos, te saqué una sonrisa.
[* * * ]
- Tranquila, Fernanda.
Tú no estás sola.
Yo estoy contigo en todo esto.
Quédate tranquila.
[* * * ]
* Con suaves caricias
Te siento al andar *
* Dame tu mirada *
* No me digas nada *
* Que mi alma
Hoy no puede volar *
Sin vergüenza **
[Ambiente calle]
[Suspiro]
- ¡Ey!
¿Qué haces vestida?
- ¿Y cómo quieres que salga
a la calle? ¿Sin ropa?
[* * *]
[Renata ríe]
Tú sabes lo que siento
por ti, ¿verdad?
- Uy, fuertes,
fuertes declaraciones.
- Ay, no, no te vayas.
- Ya es tarde, Raimundo,
de verdad.
- ¿Tarde? Pero ¿para qué?
¿Quién te espera?
- No, lo que pasa
es que sí quiero dormir algo,
porque mañana me tengo
que levantar muy temprano.
Acuérdate que estoy en guerra
con tu adorable esposa.
Mañana tenemos una reunión
importante, no quiero darle...
[Beso]
[Risas]
- A ver, dime la verdad.
Sin chistes, ni ironías.
Dime la verdad.
¿A qué viniste?
¿Qué sientes por mí?
[* * *]
[Grillos]
- Al fin llegas.
[* * *]
¿No sabes dónde
están las pastillas
para el dolor de cabeza?
- Aquí no están.
Nelly llevó todo a la habitación
de huéspedes porque...
como ahora
te duele tanto la cabeza.
[* * * ]
Que aquí no están, Esteban.
- Estoy buscando
otra cosa también.
- ¿Para tu úlcera?
- Mi mujer desaparece sin decir
para dónde va.
Mis hijas se la pasan
preguntándome:
"¿Dónde está mi mamá?"
"¿Por qué no viene a
contarnos un cuento?"
Llamo a tu teléfono
y eres incapaz de contestar.
Le pregunto a tus amigas
y no saben nada de ti.
Conclusión, Fernanda:
Sí, me volvió la úlcera.
Pero la próxima vez,
ten por lo menos la delicadeza
de decirle a tus hijas
que no vas a llegar.
[* * * ]
[Risa]
- ¿Qué te pasa, Raimundo Montes?
¿Qué te pasa? ¿Desde cuándo
interesa lo que siento por ti?
- Por supuesto que me interesa.
Así que respóndeme.
Y no te escapes por la puerta
de emergencia conmigo.
Dímelo en la cara,
sin presiones.
De cara al país
y sin protocolo.
- ¡Uy, fuertes, fuertes
declaraciones una vez más!
[Renata ríe]
- ¿Esa es tu respuesta?
No puedes decirme qué es
lo que sientes por mí. ¿Por qué?
¿Porque no quieres?
¿O porque no sabes?
- Mira, Raimundo,
si tú lo que pretendes
es que yo me rinda a tus pies
y te declare mi amor eterno
y todas esas payadas,
pues, olvídalo.
De verdad.
[Inhala]
- Pues, sí...
Sí, tienes razón.
Las cosas así contigo no van.
[Exhala]
- Qué bueno que aterrizaste,
qué bueno.
Yo pensaba que te ibas a poner
súper aburrido con eso de...
"Ay, mi amor, me quieres,
No me quieres."
De verdad, ya iba buscar
unos pañuelitos desechables
para limpiarme las lágrimas.
¿Qué? ¿Qué?
¿Tengo una arruga o algo?
¡Dime!
- No.
- Bueno.
[Beso]
Que pases buenas noches.
[* * *]
- No te vayas.
Quédate un rato más.
¿Puede ser?
- Solamente un rato.
- Un rato.
- Mjm.
- Gracias.
[* * * ]
* Y tú, te veo pasar *
* Ay mira cómo
La ciudad te castiga *
* Te castiga, mi vida *
* Y mira cómo se parece
Mi vida a la tuya *
* Cuando te veo pasar *
* Sin vergüenza *
* Sin vergüenza *
* Sin vergüenza *
* Ay mira cómo pasa la *
* La vida sin tu amor *
* Ay, mira cómo
Te me escapas de las manos *
* Y tú
Te veo pasar *
* Y cómo la ciudad te castiga *
* Sin vergüenza *
[Ruido vehicular]
- ¿Qué? ¿Ni siquiera un besito
de buenos días me das, chiquita?
[Sonido caja registradora]
- Necesito que me pases
el archivador.
Y un lápiz.
- Sí, jefa.
[Sonido caja registradora]
Aquí está.
- Lápiz.
- Dame la calculadora.
[Exhala]
- Amor, ya.
¿Hasta cuándo
vamos a estar así?
¿Que sí estás
muy enojada conmigo?
[* * *]
- ¿Acaso no te dije que Vicente
está a punto de perder el año?
- Sí.
- Traicionaste mi confianza
y te pusiste a jugar
toda la tarde con él, Kike.
- Bueno, sí, pero es que era
parte del plan, mi amor.
Yo dije, "bueno, nos relajamos
un rato y después estudiamos."
Pero es que el juego estaba
muy entretenido y entonces...
- Ahora la culpa es de
Renata porque compró el juego.
- No, mi amor,
no estoy diciendo eso, estoy...
Mi amor, escúchame.
Estoy diciendo que sí la regué.
Tienes razón.
Pero no puedes estar enojada
conmigo toda la vida por eso.
Ya te pedí perdón.
- Y yo no te voy a perdonar solo
porque tú me lo estas pidiendo.
¿Okay?
[* * * ]
Mira...
Kike, no es que este enojada
contigo porque seas un idiota.
Ni porque estés haciendo
cosas de idiotas.
Más bien estoy enojada
conmigo misma
por haberme involucrado
con un idiota.
- Estás siendo muy hiriente
y no es para tanto, mi amor.
- Pues es que
es la verdad, Kike.
¿No te pudiste resistir
al mentado juego ese?
Te pones a jugar toda la tarde,
cuando sabes perfectamente
lo importante que era para mí
que Vicente estudiara.
Y no es que yo te esté pidiendo
en algún momento
que asumas una responsabilidad
con Vicente, no.
Pero es la primera vez, Kike.
La primera vez
que yo te pido un...
Un favor de ese grado.
¡Ay!
Pero bueno, ya.
- ¿Ya?
- Por lo menos sirvió para que
se me abrieran los ojos.
- ¿Que se te abrieran
los ojos de qué?
- Para darme cuenta
de por qué estoy contigo.
[* * *]
- ¿Ya se te olvidó tu discurso
sobre los hombres?
¿Que la edad no importa?
¿Que de todos modos todos
los hombres son iguales,
unos inmaduros?
¿Qué acaso ahora sí necesitas
un hombre más grande que yo?
¿O un hombre más maduro?
¿O un buen padre al lado
de Vicente? ¿Qué quieres?
- Deja de estar diciendo
tonterías, Kike, por favor.
No entiendo qué es
lo que me quieres decir.
Metiste la pata y ahora me estás
volteando la tortilla, no.
- Bueno, entonces, sé clara,
¿qué quieres decir?
- Que necesito tiempo.
[* ** ]
- El tiempo no existe, Maite,
y lo sabes.
No es para tanto, mi amor.
- Pues, entonces...
Entonces, terminamos.
[* * * ]
* Sin vergüenza *
* Sin vergüenza **
- ¿En serio?
[* * * ]
- Perdóname, Kike, pero...
es que tú no te has querido
dar cuenta de la cantidad
de agua que me está entrando
al bote por todos lados.
[Reacciones]
- Creo que no es necesario que
enumere la cantidad de desastres
- Sí, no tienes que enumerar
ningún desastre, mi amor.
Porque yo he estado contigo
en cada uno de esos desastres
que te han pasado.
Nunca te he dejado sola, ¿o sí?
- Pues ahí está, más a mi favor,
esta vez tenías que ayudarme.
- Sí, sí... ¡perdón!
¡Perdón, la regué!
¿Es tan difícil de olvidar?
¿Qué esto nunca
me lo vas a perdonar?
Mira, Maite...
Sabes que a mí no me gusta
echar las cosas en cara,
¿pero tú cómo crees que me sentí
cuando apareció
el papá de Vicente?
¿Te preguntaste acaso
cómo me sentía?
¿Tuviste la molestia
de explicarme las cosas
de lo que estaba pasando?
No.
¿Y me enojé?
¿Me hice la víctima?
Me quedé callado, mi amor.
¿Por qué? Porque no te quiero
dar problemas.
Porque quiero que todo esté
en paz entre nosotros.
Y sí, la regué ayer.
Fui un estúpido.
Una inmadurez,
como tú dices, lo sé.
Pero esa no es una razón
para que me termines, ¿eh?
Esa no es razón, mi amor.
[* * * ]
- Kike...
[Exhala]
Yo creo que tú necesitas vivir
la vida que te corresponde.
- ¿Necesito vivir la vida
que me corresponde?
[* * * ]
Okay.
¿O tú tienes que darte cuenta
que tienes casi 30 años
y ni siquiera sabes
lo que quieres?
Y peor tantito,
no sabes ni qué vas a hacer
con tu vida.
* Estoy buscando un amor *
* A quien yo pueda amar *
* Sin temor al fracaso *
* Y al qué dirán *
* Un amor que me inunde, *
* Que me llene los poros *
* Que me cubra de besos *
* Aunque no estemos solos *
[Sonido despertador]
- Ay, me siento pésimo.
Tengo fiebre.
Ay.
- Ay, yo también.
Siento como si me hubieran
apaleado toda la noche.
[Quejumbra]
- Rafa, los niños
nos contagiaron.
[Quejumbra]
Ya debe haber llegado Ruth.
Le voy a decir que prepare
un jugo o algo.
- ¿Quieres que vaya yo?
- No, yo voy.
[Timbra teléfono]
¿Hola?
¿Ruth?
¿Qué?
Ay, no, no ahora.
[* * *]
Bueno, sí,
¿qué le vamos a hacer?
Que se mejore, Ruth.
Gracias.
Ruth también está enferma.
- Ay no.
- Buenos días, mis amores,
váyanse yendo al salón.
Hola.
- Hola, Manuela.
- Hola, Fernanda.
- Mi vida, ¿trajiste el cuento
que le vas a leer a tus amigos?
- Sí.
- Aquí está.
- Mi piojo me dijo
que le iba a contar su cuento
favorito a todo el curso.
- A ver.
Ay, "El pájaro azul".
Manuela, este también
era mi cuento favorito
cuando yo era así,
pequeña como tú.
- Sí, pero cuidado, que cuando
llega la parte donde los niños
se pierden en el bosque,
a Manuela le da mucho miedo
y se pone a llorar.
- No te preocupes.
- Vamos, mi vida,
ve con la profe.
Ya te alcanzo.
Ve al salón.
- Toma, quiero que
la guardes tú.
[Risas]
- Una foto de cuando
estábamos en el colegio.
¿Cómo la conseguiste?
- ¿No te acuerdas
de la única vez en tu vida
que te escapaste con nosotros?
- Cuando terminamos metidos en
el río que cerca el parque.
- Sí, pero esa la tomé antes.
Después, parecías
un perrito mojado.
[Risas]
[Ambiente escuela]
¿Estás bien?
¿No tuviste problemas
con Esteban?
- No...
No, no te preocupes.
- Pero sí hablaste con él, ¿no?
[* * * ]
- No... No pude.
- Fernanda, ¿has tomado
alguna decisión?
¿Nos vamos a ver?
[* * * ]
Fernanda ¿nos vamos
a ver esta noche o es que...
cambiaste de idea después
de lo de anoche?
[* * * ]
- No. No he cambiado de idea.
[* * * ]
- ¿Entonces sí nos vamos a ver?
- Fernanda.
Te estamos esperando
para cantar la canción
de buenos días.
- Sí, Rosario, ya voy.
Enseguida voy.
Me tengo que ir ahora, pero...
nos vemos en la noche.
- ¿Entonces sí nos vemos?
- Sí.
[Beso]
* Como viento fresco
Te veo pasar *
- ¡Mm!
Ay, lo sabía.
[Cepilla dientes]
¡Clarita!
Clarita, si Memé pregunta por mí
¿le puedes decir que estoy
en el banco
o metida en medio del tráfico?
Por fa', sí.
Sí, sí, yo llego
en 20 minutos, ¿okay?
[* * * ]
[* * * ]
- ¡Hola, linda!
Soy tu madre,
no un fantasma.
- ¿Mamá?
- En persona.
¿Y se puede saber
qué haces aquí?
- Ay, linda, esa no es forma
de saludar a tu madre.
Dieciséis horas de viaje
machacan a cualquiera.
Mira, mira cómo traigo
el cabello.
¡No!
Oye, ¿pintaste el departamento
o qué? No sé...
Lo veo más pequeño,
más estrecho.
Ay, no, Renata, por Dios,
tienes este departamento...
acabado.
- Bueno, bueno...
Mamá, pensaba que estabas
en Milán, en Madrid, en París,
en Italia, no sé,
en un sitio lejos de aquí.
Me agarraste por sorpresa.
[Risas]
- ¿Y no se te ocurrió pensar
que tu madre iba a venir
a festejar tu cumpleaños?
- Mamá, por favor...
Por favor, si desde
que cumplí 15 años
tú jamás has festejado un
cumpleaños conmigo, por favor.
- Ay, linda, tú siempre
tan exagerada para todo.
Voy por la otra maleta.
- Y esas maletas, mamá,
¿qué significan?
O sea, tú piensas quedarte aquí
conmigo, ¿o cómo?
- ¡Pero claro, mi vida!
- Si yo tengo que acompañarte.
- Mamá, pero yo tengo
un apartamento demasiado chico,
no tengo colchón extra. ¿Por qué
no te quedas en un hotel?
- Porque no,
porque yo vine a estar contigo.
- ¿Conmigo?
¿Y cuántos días se supone
que vas a estar aquí conmigo?
- No sé...
Mira lo que te traje.
Es lo último para adelgazar.
[Sorpresa]
- ¡Ay no!
- Te veo un poquito
pasada de peso.
[* * * ]
- Gracias, mamá, gracias.
¡Qué detallazo el tuyo!
- Son algas chinas que sirven
para el drenaje linfático.
No sé por qué siempre que veo
esas cosas, me acuerdo de ti.
Pero es que cuando
hay tendencia,
hay que cuidarse.
- Claro.
- ¿Tienes jugo de toronja?
¿No?
Sí, sí, ya sé que ahora
tengo que ir solita al súper,
a traer todas mis cositas.
- Bueno, yo me voy.
- ¡Ay!
¿Y para qué trabajas tanto?
Te vas a poner vieja
en esa oficina.
- Igual y me voy a poner vieja
algún día. Chao.
- Está bien, vete.
Deja a tu santa madre sola.
- Que no tiene mucho de santa,
la verdad.
- Salúdame a Memé.
- Adiós.
- Chao.
Bueno, yo veré
cómo me acomodo aquí.
[* * * ]
* Sin vergüenza *
* Sin vergüenza *
[Timbre]
- ¡Ya van!
[Timbre]
Ay... ¡Ya voy!
[Tose]
- Buenos días, Paloma,
aquí estoy justo a la hora.
- Hola, Julián.
- ¿A la hora de qué?
- ¿Cómo que a la hora de qué?
- Vengo por los niños.
Voy a llevarlos al colegio.
Bueno, y después
nos vamos al parque.
A correr porque
ahora que ya no tengo yeso...
me siento como un hombre nuevo.
Lo único que me falta
es partirle la pata al Rafa
y estamos parejos.
- ¿No me la quieres partir
a mí mejor?
- Palomita, una broma matutina
para alegrarte el día.
Bueno... ¿dónde están mis niños?
Me los quiero llevar
ahora mismo.
- No, Julián, no puedes.
- ¿Cómo que no puedo?
¿Cómo que no puedo?
Tengo ese derecho por la ley.
Una ley que tú me obligaste
a firmar.
- Sí, pero los niños
están enfermos.
Bueno, más bien dicho, todos
en esta casa estamos enfermos.
[Tose]
- Salud.
¿Qué tienen?
- No sé, gripa, resfriado,
influenza...
Como se llame esa cosa.
- ¿Y no puedo verlos
ni siquiera por un minuto?
- Sí, sí, pasa.
- ¿Que pase?
- Sí, Julián.
Lo que pasa es que Roque
agarró un virus en la escuela
o no sé en dónde y...
Y a Ruth le di la mañana libre
porque también está enferma.
Bueno, y yo...
quería hacer hoy en la mañana
todas las cosas para el concurso
pero me siento muy mal,
me duele la cabeza.
Y no puedo respirar casi.
Y bueno, estoy esperando a una
enfermera que me va a inyectar
pero nada más puede en la tarde.
- Bueno, Palomita,
si necesitas ayuda...
Yo puedo ponerte la inyección.
[Tose]
- ¿Tú sabes inyectar, Julián?
¿Desde cuándo?
- Desde que trabajé como doctor
en una telenovela.
Sí. Hice mi investigación,
me asesoré,
y ahora sé aplicar inyecciones.
- La verdad no sé si creerte.
Porque en todo el tiempo
que vivimos juntos
nunca mencionaste
ese talento oculto.
- Palomita, tú sabes
que puedes confiar en mí.
De hecho, soy conocido
como "manos de ángel".
Ni siquiera sentirás la aguja.
La elección es tuya, Paloma.
Una inyección puesta
por el doctor Julián
y lista de inmediato.
O tres días en cama.
[* * * ]
- Bueno, está bien pero espero
que sepas lo que haces, Julián.
- Siempre, Palomita.
Siempre.
[Secreción nasal]
- A ver...
Roque, tómate esto.
Roque, tómatelo.
No sabe tan mal, tómale.
[Reacciones]
¿No quieres tomártelo?
Te vas a poner mejor y vamos
a poder salir al parque. Ándale.
Bueno.
Ay...
[Estornudo]
[* * * ]
Muy chistoso, ¿verdad?
[Estornudo]
[Roque ríe]
[* * * ]
- Déjate inyectar, Paloma.
Paloma, no me digas
que eres una gallina
para esto de las inyecciones.
[Estornudo]
Salud.
- Bueno, está bien.
- Te voy a pinchar...
y ni cuenta te vas a dar.
[Carraspeo]
Muy bien, señora...
Desnúdese.
[* * * ]
Es una broma, Paloma.
Por favor, despeje el área.
Hola.
- Julián, hazlo lo más rápido
posible, por favor.
- Relájate, relájate.
[Palmaditas]
- ¡Ay!
- Paloma, todavía no te pinché.
- Pero me dolió, Julián.
Hazlo antes de que
me arrepienta, ya.
[Secreción nasal]
[* * * ]
- ¿Paloma?
¿Qué estás haciendo así
con este tipo?
[* * * ]
[* * * ]
[Ambiente calle]
- ¡No! Mi respuesta sigue siendo
un rotundo "no".
- ¡Memé, por Dios!
Ni siquiera me has dejado
terminar las ventajas
de las toallas sanitarias
y ya me dices que no.
-Es que no estás diciendo
nada original, Renata.
- La innovación que estamos
pensando introducir
en esta línea
de protección sanitaria,
tiene que ver con sacar toallas
con aloe vera.
- ¡Ay, por favor, Renata!
Tienes que esforzarte
un poquito más.
- ¿A qué te refieres, Memé?
- A que el aloe vera ya viene
como valor agregado
en las toallas
de la competencia.
Si queremos diferenciarnos
y destacar,
tenemos que innovar,
no copiar.
- Un momento,
un momento, Memé.
A lo mejor Renata tiene
una innovación con el aloe vera.
Puede ser que quiera que
las clientas se lo coman.
¿No?
[Risas]
- Esteban, yo agradezco
tu esfuerzo
por hacer más llevadera
esta reunión
con tus chistes de mal gusto.
Pero, por favor, no nos hagas
perder el tiempo.
Renata, por favor, continúa.
- Ay, sí, pero con algo
más creativo, por favor.
Raimundo, sabes lo competitivo
que es este mercado.
- Para allá iba, Memé,
si me permites. Gracias.
Pienso que es muy importante
que con nuestros productos
marquemos una pauta.
[Bostezo]
Pero me parece que tenemos que
enfatizar en ciertos aspectos
que son... que son necesarios,
como por ejemplo,
el empaque,
la forma de las toallas,
la publicidad que
se le va a hacer al producto.
[Carraspeo]
[* * * ]
[* * * ]
- ¿Qué es lo que
está pasando aquí?
- Rafa, Rafa, tranquilo,
tranquilo.
- Lo que pasa es que Julián
se ofreció para...
- ¿Se ofreció para qué, Paloma?
¡Eres un desgraciado!
- ¡Cálmate, Rafa!
¡Cálmate!
- Lo que pasa es que Julián
sabe poner inyecciones
entonces me dijo que si me ponía
una para que me mejore.
- Tranquilo.
Es que llegué y la vi muy mal
y me ofrecí a aplicarle
un antibiótico para que
se recupere pronto.
- ¿Por qué no te largas?
- Un momentito, Rafa,
perdón, pero
tú no me puedes botar a mí
de la casa de mis hijos.
- No, tú puedes venir por ellos
para llevarlos a pasear
pero no tienes
por qué estar aquí.
- Mira, Rafael,
lo que pasa es que...
los niños no pueden salir
porque están enfermos.
- Rafael.
Rafael...
Yo no quiero pelear.
[Rafael estornuda]
- Salud.
- Lo único que quiero hacer
es algo por ustedes.
- Yo tampoco quiero pelear
pero no me gusta que estés en
mi habitación con mi mujer.
- Mira, Rafa, ya te expliqué
que Julián
vino a ponerme una inyección.
- Rafa...
Te noto muy resfriado.
¿¿No...?
¿No quieres que te aplique?
[Estornudo]
¿Qué dices?
[Secreción nasal]
- Ni muerto.
- Rafa...
Rafa, Paloma.
Por favor déjenme
hacer algo por ustedes.
Es que, mírense...
Apenas pueden respirar.
Por favor, déjenme inyectarles.
Les prometo que
ni lo van a sentir.
¿Mmm?
[* * * ]
* Sin vergüenza *
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